Lo he escrito para jóvenes con dos objetivos principales:

1. Para demostrar que la Biblia es la palabra buena de Dios para su mundo.
2. Para ofrecer práctica a la hora de descubrir y vivir lo que la Biblia sostiene que es bueno.

Te los explico contando mi historia. Crecí en Sídney, Australia. Mi madre me enseñaba acerca de Cristo Jesús desde antes de lo que puedo recordar. Me llevaba a una iglesia en la que conocí a Jesús cada vez más. Empecé a experimentar algunas dudas a lo largo de mi etapa estudiantil en el instituto y en la universidad. Varias personas, que creían que la Biblia es buena y clara, me retaron a investigarla por mí mismo. Lo hice, y poco a poco me convencí de que Jesús no solo era real y mi Salvador, sino también el Señor del universo.

Sin embargo, me encontré muchas veces discutiendo con algunos familiares y amigos sobre varios asuntos. De vez en cuando pensaba que tenían buenos argumentos y razones, especialmente en cuanto a cosas como el amor y el sexo. Únicamente podía contestarles diciendo, “¡La Biblia dice que no!”, sin ninguna alternativa positiva. Estaba luchando para mantener mi seguridad de que la Biblia era la palabra de Dios, que era buena tanto para mí como para nuestro mundo.

Empecé a estudiar para el ministerio cristiano en el seminario teológico de Moore (Moore Theological College) en Sídney, Australia. Las asignaturas sobre ética cristiana me confirmaron que la Biblia además de ser verdadera y buena, también era el mejor recurso para descubrir cómo vivir bien en este mundo. Me presentaba el bien en todos los aspectos de la vida, no solo respuestas afirmativas o negativas. Al pasar tiempo con otros cristianos en diversos grupos, me habían dado buenos ejemplos de cómo la Biblia hacía esto, pero yo no había identificado lo que estaban haciendo. Entonces por primera vez fui consciente de lo que era una herramienta íntegra y completa para abordar la vida: el uso de textos bíblicos junto al conocimiento de Dios (a veces se llama teología o doctrina). Me hizo mucha ilusión que el Dr. Andrew Cameron, mi profesor de ética cristiana, publicara un resumen de su material en el libro Joined-up Life.

En lugar de sentir vergüenza por la manera en que la Biblia me enseñaba a vivir, quería ayudar a otros a ver lo buena que era. Deseaba ayudar a los adolescentes, especialmente a los que estaban pasando por la misma etapa de dudas —buscando su identidad— que yo había experimentado.

En España conocí a muchos adolescentes de varias iglesias. Habían sido bien enseñados en general, disponían de un buen conocimiento de quién era Dios, pero muchos carecían de su propia seguridad en la Biblia. Al tener que ponerla en práctica, dirían: “Mi iglesia dice que puedo hacer esto o que no debo hacer eso”. Pero les costaba defender la idoneidad de la Biblia cuando otros cuestionaban sus decisiones. Mis amigos que trabajaban con jóvenes en Australia vieron lo mismo. Ni allí ni en España era seguro que los jóvenes de familias cristianas creerían lo que les enseñaban sobre Dios ni confiarían en que su manera de vivir era buena. Sus amigos ya no creían que la Biblia o los cristianos eran buenos. Al contrario, consideraban que ambos representaban la esclavitud y opresión.

Estaba cada vez más convencido de que los jóvenes cristianos necesitaban tanto leer la Palabra de Dios ellos mismos como trabajar una herramienta para la ética cristiana. Quería presentar la del Joined-up Life de Dr. Andrew Cameron de una forma más accesible que pudiera acompañar a los jóvenes que estaban empezando a leer la Biblia solos. Así que he escrito lo que yo me hubiera dado a mí mismo de adolescente para ayudarme tanto a confiar en que la Biblia es la buena palabra de Dios para su mundo, como a aprender y practicar cómo descubrir y vivir lo que sostiene ser bueno.

Estoy orando para que este libro haga justo esto por ti.

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Una nueva libertad, Mike Snowdon

Estás leyendo esto porque sabes que, en realidad, no eres libre. Estás buscando, descubriendo quién eres de verdad, pero las olas de la vida te hunden. Todo el mundo da su propia opinión sobre lo que es bueno, y tú estás ahí en medio, ahogándote. Sin embargo, anhelas poder volar, y vivir la vida al máximo.

Solo Jesús puede ofrecerte la verdadera libertad. Él siempre es bueno, siempre es íntegro, y siempre cuenta una historia mejor que la del mundo, si te atreves a escucharle. Este libro es un manual de entrenamiento sobre cómo usar la Biblia para afrontar la vida. Aprenderás cómo Jesús te libera para abordar cualquier tema: los estudios, el dinero, el sufrimiento, la violencia, el sexo y la identidad. Descubrirás tú mismo por qué Jesús y su Palabra nos ayudan a vivir en libertad mejor que cualquier otra cosa. Y mientras vas creciendo y practicando, enseñarás a los que te rodean una nueva libertad.