Me encanta la transparencia de Nicholas. Vemos su autenticidad en cada página. ¡Algo muy importante para un libro con este título! No pretende ser el don sabio que lo tiene todo arreglado, sino más bien el mendigo que muestra a otros mendigos dónde está el tesoro que ha encontrado.

Usando ejemplos de su propia vida y un sentido del humor cercano, nos lleva a la parábola de Jesús sobre el fariseo y el recaudador de impuestos. Allí nos muestra que hay una solución si estamos dispuestos a ser sinceros con nosotros mismos. Prepárate para enfrentarte a lo que realmente hay dentro de ti con esa parábola, porque Nicholas nos lleva allí con un propósito. Es una de las parábolas más chungas de Jesús porque está claro que deberíamos vernos reflejados en uno de esos dos personajes, sea en el fariseo o en el recaudador de impuestos, pero no queremos que sea ninguno de los dos.

¿Quién quiere identificarse con el fariseo arrogante y creído? ¿Quién quiere identificarse con el recaudador de impuestos pecaminoso y traidor? Buscamos la tercera opción, pero no la hay.

Con ternura y cariño, Nicholas nos muestra de qué maneras somos como ese fariseo, menospreciando a los demás e intentando superarlos en la comparación. Y también, cómo nos refleja el recaudador de impuestos: pecadores en necesidad de la misericordia y gracia de Dios para luego mostrar lo mismo a los demás.

Siempre señalando a sí mismo como un culpable de primera categoría, Nicholas habla sinceramente de su lucha con el deseo de justificarse a sí mismo; eso de verse como una buena persona que realmente no necesita ayuda, y no es para nada difícil identificarnos con su experiencia. ¿Quién no quiere que los demás lo admiren? Hoy en día, viendo hasta los detalles más íntimos de las vidas de los demás proclamados a los cuatro vientos en las redes sociales, es un gran reto no compararnos con ellos.

La tentación de ser falso es tan atractiva e irresistible que llega a ser casi necesaria en nuestras vidas.

Pero hay una respuesta y se encuentra a los pies del Rey. Nicholas nos lleva allí a meditar en la gracia y misericordia de Dios, y en cómo eso nos puede transformar en seres auténticamente auténticos.

Un buen libro para cualquier joven o adulto que quiere glorificar a Dios con su vida en medio de una sociedad perversa y alejada de Él.

Reseña escrita por Giles Davis. Giles vive en Madrid con la mujer de sus sueños, y tienen tres hijos, una hija y una nieta. Giles lleva casi 30 años trabajando con jóvenes. La verdad es que nunca ha llegado a ser adulto, pero si algún día lo consigue, te avisaremos…

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